La política de privatizaciones, ha ido demoliendo la vida productiva en la industria y el campo, y ha dado paso a la celulosa, a la forestación, a la soja transgénica, y a la importación de todo tipo de productos alimenticios que han dejado de producirse en nuestro país.
AVANZAR POR UN CAMINO NUEVO
El camino no es ni el de los tratados de libre comercio, ni rendiciones de cuenta que apuesten al recorte de puestos de trabajo y salarios, así como de la inversión pública.
¿DÓNDE ESTÁ EL «PAÍS PRODUCTIVO»?
El gobierno nacional ha perdido tiempo, y ahora nuevamente está apurado tapando y achicando cuentas y afiliándose una y otra vez, a doctrinas económicas que no tienen en cuenta el trabajo, ni el salario nacional.
Debe estar conectado para enviar un comentario.