ESTA VEZ LO DIO EL PARLAMENTO
Si algo está claro en todo este proceso y particularmente en estos hechos en Paraguay, es que el capitalismo mundial, no sólo ha aumentado su agresividad contra los pueblos, sino que además ha encontrado nuevos métodos de legitimación de sus aventuras y provocaciones de carácter terrorista.
No es posible entender lo que sucede en esta zona de América del Sur sin apreciar el desarrollo de la historia de nuestros países, así como sus vínculos históricos con el proceso del capitalismo mundial.
Sin duda que nuestra región está conmovida con lo que ha sucedido en Paraguay por el derrocamiento del presidente constitucional Lugo por parte de la mayoría del Senado y lo que es más el nombramiento de Franco pasando de su cargo de vicepresidente al de primer mandatario.
Dos hechos por demás notorios que queremos anotar, el primero, es el seguimiento informativo, de la CNN como un hecho que habla claramente del papel de la principal agencia norteamericana jugando claramente a favor del proceso de desestabilización en Paraguay.
El segundo, que no ha pasado por alto en estos días es el apoyo al nuevo orden de Franco, por parte del embajador de Alemania en ese país, cosa que no puede pasar desapercibida, por dos aspectos de los contenidos de este hecho. El primero que los vínculos de Stroessner en tiempos que Alemania estaba dividida con la RFA, son evidentes y muy notorios, cosa que es obvio que se mantienen hasta nuestros días. Por cierto que son muy importantes, sobretodo cuando estamos hablando de la principal economía de la UE, que bajo el gobierno de Merkel pretende hacerle pagar los platos rotos a los otros países europeos, no solo por el costoso proceso de reunificación en su país, que lleva más de dos décadas, sino también su nuevo reinado económico y financiero y sus inocultables vínculos con la región.
No es posible olvidar que hace apenas unos años existió en la localidad de Santa Cruz un verdadero intento de separación y subversión interna contra Evo Morales en Bolivia, por parte de una minoría de inspiración nacional socialista, y de clara inspiración reaccionaria y racista.
Hace apena unas semanas en el Chaco argentino, el gobierno de Cristina Fernández impidió la instalación de una base militar norteamericana cuya fachada era de fines “humanitarios” otorgada por el gobernador de dicha provincia.
Si algo está claro en todo este proceso y particularmente en estos hechos en Paraguay, es que el capitalismo mundial, no sólo ha aumentado su agresividad contra los pueblos, sino que además ha encontrado nuevos métodos de legitimación de sus aventuras y provocaciones de carácter terrorista.
Las nuevas necesidades de apropiación de grandes extensiones de tierra para su explotación en materia de recursos de todo tipo, lo lleva a montar cada vez mayores acciones que legitimen sus nuevas matanzas de campesinos.
No es la primera vez que ello sucede en los últimos años, y está claro además que uno de sus objetivos más importantes es que las políticas independientes de los pueblos avancen por el camino de la integración y la independencia regional.
Ya el golpe de Honduras fue para impedir que se entrara al ALBA, todos los países del ALBA tienen en este momento algún intento de golpe de estado en su historial inmediato.
El montaje es lo de menos y varía según el país y los distintos escenarios que configura la lucha entre las clases, secuestro de Presidentes, por policías o ejércitos, o para miliares, en fin, las alternativas dependen de las condiciones. En Paraguay empezó con un negociación, siguió con asesinatos de campesinos y policías y luego el Parlamento dio el golpe de gracia. Todo legal, igual que en Uruguay por cierto, donde hace casi cuarenta años Bordaberry y las Fuerzas Armadas terminaron con las instituciones, los partidos y sindicatos. Golpe oligárquico fascista.
Viva la lucha del pueblo paraguayo!
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