Columna: Edgar Lenin Rodríguez

ESTÁN PREOCUPADOS Y SE NOTA

Edgar Lenin Rodríguez (*)
SUNCA, SUNCA, que viva el SUNCA! Estas fueron las palabras de Mujica en la apertura del congreso del sindicato de la industria de la construcción. Puede que alguno le parezca raro que el presidente, y otros miembros, así como personajes del partido de gobierno, participaran del congreso sindical; pero bueno se ve que la independencia, ahora es dependencia, solo que no se ve con mucha claridad quien necesita más a quien.
Por ejemplo en la planta de celulosa que se construye en Conchillas, cuando los trabajadores se comienzan a preocupar porque ven que en poco tiempo se quedaran sin trabajo, los dirigentes sindicales los calman diciéndoles que hay proyectadas más plantas de celulosa, incluso la obra gigantesca de la mega minería. Esto es terrible, y es cierto que sería muy injusto enojarse con obreros que necesitan trabajar, y por lo tanto son inducidos por los agentes del sistema, militando casi todos en el progresismo. Pero para entender esta cruel realidad la podemos comparar con los bomberos zafrales, que cada vez que llega la temporada son contratados para combatir los incendios forestales, imaginémonos que ante la intranquilidad que ellos puedan tener al finalizar la temporada estival, el director responsable, les diga “muchachos pueden estar tranquilos que el gobierno piensa continuar avanzando con el monocultivo forestal, hasta tapar el Uruguay de pinos y eucaliptos, por lo que tendremos una zona más extensa para ser atendida y ustedes tendrán trabajo todo el año” bien por los bomberos que necesitan trabajar, pero ¿a qué costo ellos mantendrán su fuente laboral? 
Decíamos al principio que no sabemos quien depende de quien, y al ver como se manejan los personajes del poder, nos queda la duda si en Uruguay se podría blanquear tanto dinero, instalar y degradar tanto este suelo si no fuera por ellos, los dirigentes sindicales actuales de la industria, sería imposible instalar tantos proyectos contra natura, y si no fuera también por los agentes del sistema atestados en el partido de gobierno. 
Por lo tanto es lógico que el gobierno, las cámaras empresariales, cámaras de la construcción, promotores privados y blanqueadores anónimos, griten SUNCA, SUNCA. No es gracias al sindicato que los trabajadores de la construcción tienen empleo, es gracias al sindicato, o mejor dicho a los dirigentes sindicales, que los chupasangristas del mundo, ponen sus ojos en este suelo. Claro que no quieren romper la unidad sindical, ni el gobierno, ni los patrones, ni los dirigentes; es como una orgía, o una fiesta de tres donde la están pasando bárbaro, y la clase trabajadora va rescatando las migajas que sobran o caen. Y es justamente por eso que nos hemos propuesto roer tanto esta estructura oficialista, entendemos la unidad para luchar contra el sistema de opresión, y ellos para conciliar y entregar. 
Están preocupados y se nota, los de abajo se están moviendo, y ya dejan de identificarse con esa central.
 
(*) OBRERO DE LA CONSTRUCCIÓN, MILITANTE DEL 26 DE MARZO, INTEGRANTE DEL ENCUENTRO NACIONAL DE TRABAJADORES, ESTUDIANTES Y JUBILADOS (ENTEJ)

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