MOVIMIENTO 26 DE MARZO

TOCA EL TAMBORIL Y NO LO HACE BIEN. EN EDUCACIÓN IGUAL: SOLO DE OÍDO…

Nuevamente el gobierno se ha puesto de “poncho” a todo el magisterio nacional, sobre todo por sus impresentables declaraciones sobre la estatura de los maestros, que no tiene otra dimensión ideológica que su aversión por el magisterio

En los últimos tiempos la crisis que tiene la educación, no e s una novedad para los uruguayos, aunque de alguna forma si es algo nuevo que se ha dio afirmando ante la ciudadanía es el nuevo papel de la ministra Muñoz, que en sus nuevo papel de excentricidades, va reafirmando una política global autoritaria contra el magisterio y la docencia en general de su cartera.
La última huelga que se produjo en los maestros y profesores el año pasado, ha dejado importantes huellas en la vida social y en el partido de gobierno provocando puntos de vista y fisuras en la aplicación de su política. El nuevo ataque de la ministra a uno de su equipo renunciante resultado de esta situación lleva invariablemente a un nuevo giro de los acontecimientos de la versión criolla de la ministra de “faldas de hierro” del Dr. Vázquez.

No están muy lejanos los tiempos en que bailó sobre una mesa de un boliche, de Tel Aviv, en una visita de gobierno a éste país, y en los últimos años el contenido y forma de su expresión pública han estado cada vez más en consonancia.
Nuevamente el gobierno se ha puesto de “poncho” a todo el magisterio nacional, sobre todo por sus impresentables declaraciones sobre la estatura de los maestros, que no tiene otra dimensión ideológica que su aversión por el magisterio y sus bajos salarios de lo que por cierto el gobierno y su persona está muy lejos.
Sin duda que en la política que ha llevado adelante el gobierno en materia educativa está la razón principal por la cual el gobierno se aleja en forma casi violenta del hecho educativo, en tiempos que una ministra piensa en términos tan despectivos sobre el magisterio nacional, no pensamos que ello exprese una razón aislada sino que obedece a razones política de la política de gobierno y también a las contradicciones políticas que cada vez mayores que expresa su aplicación, no solo con el magisterio sino también con su partido en el gobierno.
En realidad más que los maestros, lo que no han estado “a la altura” en todo este tiempo han sido los burócratas que manipulan y entierran la educación pública del país, intentando una nueva política casi macartista, en materia de educativa. Aunque lo que surge de todo esto es el estado de ideas deplorable que surge de las altas esferas, sobre el quehacer educativo nacional, que no es que sean pequeñas, sino que evidencian un gran regreso de las orientaciones de la política educativa.
No es nuevo que cuando el gobierno abandonó una política educativa que pretenda desarrollar a las clases populares, lo que ha crecido es la nueva lumpenización que surge de algunos sectores de las clases acomodadas para los que obviamente los “maestros no están a la altura”. La lumpenización no es sólo del Marconí o de los “ni, ni”, o de las cárceles donde hacinan a los pobres, inventando a diario nuevos codigos y más años de cárceles, como les encanta repetir a los medios de comunicación y a los grandes partidos del gobierno y la derecha tradicional.
Hay que ver quiénes son los exponentes mayores de estos nuevos fenómenos que afectan a los hasta ayer izquierdistas en este país, que están encantados con Tel Aviv y Negroponte para imponer sus políticas represivas y de barniz educativo.